Han pasado tantas cosas

Hacía tanto tiempo que no sentía ganas de sentarme delante del ordenador que ya había olvidado el placer que inunda mi cuerpo al escribir. No me gustan los relatos cortos y por eso no había publicado nada hasta la fecha. Decenas de entradas catalogadas como "borradores" abarrotan mi pantalla. Párrafos sin relación aparente unos con otros pero que narran historias casi fantásticas.

Han pasado tantas cosas en este mes y medio... Nunca pensé que me iría tan lejos de casa, que ganara tanto dinero haciendo tan poca cosa, que me gustara tanto jugar al fútsal, o que hay que distinguir entre la gente y las personas. Me he reencontrado con viejos amigos, he buscado la paz que ansío desde hace meses, he sabido encontrarme a mí mismo y a mí mismo perderme, he hecho tantas cosas que no sé por dónde empezar.

Gran Canaria - Girona - Wrocław - Girona - Barcelona - Tenerife - Gran Canaria:

Por suerte, o por desgracia, el título de este apartado se refiere al viaje que hice hace poco. En enero me tocó Barcelona y ahora, en mayo, ha caído Wroclaw. El viaje fue duro. Más de 4.500 kilómetros desde Gran Canaria hasta Wrocław.

Polonia es un país frío. La gente no se habla si no conocen previamente, no tienen ese carácter amable y amistoso que nos caracteriza a los españoles. Pero al fin y al cabo mereció la pena. Tres semanas aprendiendo polaco, conociendo una nueva cultura, viendo edificios que en España no existen, mirando paisajes y un largo etcétera que ensencillece la lista. Días de sol, días lluvia, con viento, sin viento, con humedad del 90%... un clima muy cambiante. La playa más cercana a más de 680 kilómetros y nosotros, canariones, deseando ver algo de mar. Por suerte tres ríos pasan por Wrocław, la llaman la ciudad de los puentes por sus más de cien puentes de todo tipo y tamaño. Nunca pensé en ver las cosas que ví. He tenido suerte y he podido viajar. La próxima vez, no sé donde iré pero tengo seguro que será algún país europeo con cultura y sociedad.

Gracias a este viaje he puesto respuesta a muchas preguntas y también me he dado cuenta de lo que soy capaz. ¡Me encanta esta sensación!.

Me he planteado la posibilidad de viajar a América pero es algo que, por ahora, no contemplo. Demasiadas horas de vuelo para visitar Estados Unidos. Ya iré, soy jóven aun. ¿No?

Este tipo de cosas se las busca uno mismo. No pasan porque sí. Estuve esperando mucho tiempo y he hecho varios sacrificios para poder estar como estoy actualmente. Polonia ha sido un pequeño esbozo de lo que quiero hacer en el futuro y me encantaría cumplir mis metas.

Esta entrada podría pasar como una imágen de optimismo y felicidad. Todo a vuelto a su cauce. Pues no, no es así. Ahora me doy a vicios poco recomendables y eso me facilita el dia a dia. Cuanto menos pienso, mejor vivo. Las preocupaciones ya no tienen cabida y el insomnio deja paso a un placentero sueño donde, por desgracia, siempre me espera la misma persona.